Por Redacción Impacto Nocturno | Santa María del Sur
Lo que debía ser una noche de celebración terminó en tragedia. La madrugada del sábado, un Lamborghini Huracán Evo se estrelló contra un poste en la salida norte de Santa María del Sur. A bordo iban Luis Mateus y Briana Roddy, una pareja conocida por su presencia constante en eventos sociales, fiestas exclusivas y por protagonizar una historia de amor que muchos envidiaban… hasta que terminó envuelta en humo y sirenas.
Un amor de cuatro años… y un final abrupto 💔
Luis y Briana celebraban su cuarto aniversario de noviazgo en la discoteca Ámbar Club, donde fueron vistos riendo, bebiendo y bailando hasta las 4:03 a.m., según captaron las cámaras de seguridad. Vestidos como celebridades, salieron del lugar en el bólido que tanto presumían en redes.
“¡Luis, vamos a brindar por nosotros otra vez, otra, otra!”, gritaba Briana, mientras los amigos a su alrededor coreaban y reían. Nadie imaginaba que ese sería el último video que verían de ellos juntos con vida.
Minutos después, al tomar la curva de la Vía Altamira a más de 160 km/h, el Lamborghini perdió el control. El impacto fue brutal. El vehículo se partió en dos. Luis falleció en el acto. Briana, con heridas graves, fue trasladada al Hospital Central, donde aún lucha entre la vida y la muerte.
Las primeras versiones: alcohol y exceso de velocidad 🥃🚫
Los peritos de tránsito confirmaron que ambos presentaban altos niveles de alcohol en la sangre, según los exámenes toxicológicos preliminares. Las autoridades afirman que fue un caso típico de conducción imprudente bajo los efectos del licor.
Pero lo que parecía un accidente más de jóvenes fiesteros se volvió una tormenta mediática cuando la madre de Luis, doña Raquel Mateus, rompió el silencio.
“¡Esa mujer lo destruyó!”, gritó entre sollozos frente a las cámaras de Canal 7 Noticias, mientras sostenía una foto de su hijo.
“Desde que conoció a Briana, todo cambió. Ella era la que lo empujaba a la fiesta, al exceso, al trago. ¡Luis no era así! Mi hijo era noble, era tranquilo… ella le metió en la cabeza que para vivir había que destruirse.”
Los rumores estallaron como pólvora: amigos de Luis aseguran que él había intentado frenar el ritmo de su vida en las últimas semanas. Quería invertir en una finca, casarse, hasta hablaron de tener hijos. Pero Briana, decían, quería seguir de rumba en rumba, en lo que algunos describieron como una “vida de hedonismo sin brújula”.
¿Complot o casualidad? El detalle que lo cambió todo 🔍🧩
Lo más perturbador del caso es que, según los informes policiales, las cámaras de la autopista no registraron el paso del Lamborghini en el tramo anterior al choque. Es como si el vehículo hubiera aparecido de la nada, sin que nadie viera cómo llegó hasta el punto del impacto.
Además, testigos afirman haber escuchado una explosión segundos antes del accidente. Un hombre, que pidió anonimato, aseguró:
“Ese carro ya venía mal. Yo lo vi tambaleando desde antes de la curva. Y juraría que alguien lo seguía en una moto negra, pero la policía no dice nada de eso.”
Un oficial fuera de grabación mencionó: “Hay cosas que no cuadran. No descartamos ninguna hipótesis. Esto podría ser más que un accidente.”
Una ciudad dividida 🏙️⚖️
Mientras Briana se recupera en silencio y con custodia policial por posible homicidio culposo, las redes sociales están polarizadas. Unos la defienden como víctima de la noche, del alcohol y del amor. Otros la señalan como la culpable de haber arrastrado a Luis a una vida sin frenos.
“Ella solo quería vivir, y él quería amarla”, escribió una usuaria.
“¡Que pague por lo que hizo!”, comentó otro con rabia.
En la despedida del joven, las palabras de su madre retumbaron como un eco frío:
“Te dije, mijo, que el amor no siempre es salvación… a veces es el veneno más dulce.”
Reflexión final: ¿Hasta dónde puede llevarnos el amor desenfrenado? 💭
Lo que comenzó como una historia romántica, terminó como un episodio de advertencia. El brillo de una relación no siempre ilumina el camino. A veces, enceguece.
